El fotógrafo londinense Paul Goldstein captó el momento en el que un león macho montaba a otro en la reserva natural Masái Mara, en Kenia. Ambos estuvieron más de un minuto apareándose y tras el coito, la cabeza de uno de ellos descansaba sobre la del otro. Qué romántico.
Paul Goldstein ha declarado al Daily Mail:
«incluso cuando el león desmontó no se echó para atrás, como es normal después de un apareamiento, en cambio se arrastró hasta el hocico del otro macho por una caricia y lanzó un guiño cómplice en su dirección”
Tras su difusión, el director ejecutivo del Instituto gubernamental de Clasificación de Películas de Kenia (censura con todas las letras) ha declarado a los medios que ambos leones deben estar poseídos por el demonio (sic):
«La homosexualidad es impulsada por una fuerza demoníaca y los demonios también poseen animales. Los espíritus demoníacos parecen haber alcanzado a los animales“ (…) sería necesario aislar a los animales homosexuales locos y estudiar su comportamiento porque no es normal. La sola idea de sexo incluso entre animales es para la procreación. Dos leones machos no pueden procrear y, por lo tanto, perderemos la especie de león. (..)se necesita hacer algo de investigación. También me gustaría poder obtener la biografía para confirmar que los dos leones eran en realidad hombres, porque no es normal (…)Estos animales necesitan asesoramiento, porque probablemente han sido influenciados por homosexuales que han ido a los parques nacionales y se comportaron mal. No sé, deben haberlo copiado en alguna parte o es demoníaco. Porque estos animales no ven películas»
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